PILATUS PC-7 CUMPLE 40 AÑOS EN LA AVIACIÓN NAVAL

La Aviación Naval Chilena ha sido parte importante de la historia aeronáutica nacional  desde que en 1916 se dio inicio al primer curso de Aviadores Navales y desde 1919, año en que comenzó sus actividades como Servicio de la Aviación Naval, de ahí en adelante una serie de hitos y hechos históricos marcan la vida de esta importante unidad de la Armada de Chile. En esta oportunidad nos detendremos en el hecho que se celebra hoy 22 de Mayo: La llegada a Chile de los aviones Pilatus PC-7 Turbo Trainer hace 40 años.

A finales de los años 70, Cuando la envejecida y pequeña flota  de 5 (6 originalmente)  nobles aviones Beechraft T-34 Mentor de la aviación naval ya habían dado extensas horas de vuelo a la Nación y se hacía cada vez más necesaria su renovación junto con el aumento de capacidades de la Escuela de Aviación Naval. El alto mando naval ordena la búsqueda de un avión de reemplazo en medio de varios problemas que afectaban la situación de esos aviones. Algunos de esos problemas eran niveles críticos de obsolescencia y disponibilidad y un bajo nivel de equipamiento en medio de crecientes tensiones vecinales de esa época.  Los T-34 sirvieron poco más de 13 años en la Armada de Chile, pero acumulaban una gran vida de servicios en los Estados Unidos debido a que fueron adquiridos de segunda mano en ese país. En la partida se incluyó al tercer prototipo de fábrica, lo que da una idea de la longevidad de las unidades y este avión (Naval 204) que permanece preservado en el museo aeronaval de la Base Aeronaval Concón es en la actualidad el T-34 Mentor más antiguo del mundo, ya que los 2 prototipos anteriores fueron destruidos en accidentes mientras pertenecían a la fábrica.

Los antiguos T-34 sobre la costa de Viña del Mar
Volando Sobre Viña del Mar donde ahora se encuentran malls y centros comerciales

Estos T-34, luego de servir formando sucesivas promociones de pilotos, con un intenso uso que característico de las aeronaves de instrucción primaria y básica. Sumado a la pérdida de uno de ellos en un accidente mientras efectuaba un ejercicio de tiro a tierra. Para esa época, estaba la Aviación Naval en complejas condiciones de disponibilidad y obsolescencia de su material de instrucción.  En sumatoria, la llegada de los Casa 212 propulsados por turbina, la planificación del futuro equipamiento aeronaval  y las razones ya mencionadas obligaron a la búsqueda de material de instrucción moderno en base a un sistema dotado de una planta turbohélice.

El T-34 Mentor más antiguo del mundo en el Museo Aeronaval

Así con fecha 04 de septiembre de 1979, se firmó el contrato de compra  con la firma PILATUS AIRCRAFT LTD. de Suiza por un total de 10 aviones de instrucción Pilatus PC-7 Turbo Trainer. Material de vuelo muy moderno que vendría a reemplaza al viejo y cansado Mentor y a multiplicar las capacidades de la fuerza. Así comenzó a ejecutarse El Plan “Pascua”,   como fue conocido el proyecto de incorporación de estas aeronaves.

El 11 de febrero de 1980, se designó al destacamento de aviadores navales que viajaría a Europa a efectuar los cursos en el nuevo avión en la fábrica suiza para convertirse en instructores y encargarse  de traer en vuelo las nuevas unidades a Chile. Esta dotación viajó a Zurich el día 26 de marzo de ese año y para el día 30 se realizó en la ciudad de Stand -sede del fabricante- la recepción de las aeronaves con matrícula Naval 210, 211, 212 y 213. 

A comienzos del mes de abril de 1980  pilotos y mecánicos recibieron la instrucción teórica inicial del material de vuelo en forma conjunta, pero concluida esta etapa los pilotos se trasladaron a Locarno para iniciar la instrucción de vuelo utilizando para ello los aviones Naval 210 y Naval 211, mientras el grupo de mecánicos permaneció en la fábrica para continuar con su programa de instrucción con un curso especial de mantenimiento del PC-7.

Naval 210 en la fabrica en Stand Suiza
Naval 211 con la capota para entrenamiento IFR

EL VIAJE A CHILE

Traer las aeronaves en vuelo desde el viejo continente hasta el extremo de América del Sur  representa un enorme desafío que comprendía más 11 mil millas en diferentes condiciones meteorológicas y operacionales complejas para un monomotor ,ya que se trata de un avión  cuyo alcance es de 1420 mn y su autonomía de 3.45 hrs (sin estanques adicionales) por lo que la planificación debía ser en extremo cuidadosa, se agrega el hecho de que se deben superar barreras burocráticas y reglamentarias entre otras.  Para este cometido se eligió una ruta muy similar a la utilizada por los aviones Casa 212 que en 1978 habían cruzado el Atlántico Norte para integrarse a la Aviación Naval.

Para el día 6 de mayo en la ciudad  de Stand se inicia la travesía del destacamento “ALFA VT-4” integrado por las  nuevas unidades aeronavales. 

Entrenamiento en Suiza
Aviones listos para su viaje a Chile

Para poder realizar la travesía y con la obligatoria necesidad de incrementar las medidas de seguridad para el traslado sobre el mar, junto con cumplir las exigencias establecidas para el cruce del Océano Atlántico, se dotó a las aeronaves de equipos  de navegación/comunicación adicionales tales como un Sistema Omega, un HF y VHF extra, los que posteriormente se debieron retirar en  Chile para poder ser usados en la navegación del Atlántico Norte por el segundo grupo de aviones.

La Ruta comprendió el siguiente itinerario con sus respectivos Block Time y distancias voladas:

 

El 22 de mayo a las 11:00 hrs. del año 1980, arribó a la base aérea  “El Belloto” el Destacamento “Alfa-VT-4” después de haber recorrido una distancia de 11.506 millas y un total de 67 horas  55 minutos de vuelo.  En aquella oportunidad los aviones efectuaron pasadas de saludo sobre la torre de control y posterior desprendimiento táctico enalteciendo  el especial momento de su llegada.   Cuatro días después del arribo del los flamantes PC-7, el 26 de mayo se realizó la ceremonia oficial de recepción del nuevo material aéreo.

Mientras el primer grupo se encontraba en Suiza, el día 24 de abril de 1980, la Comandancia en Jefe de la Armada, designa al segundo grupo de Oficiales y Gente de Mar para viajar a Europa a recepcionar las cuatro siguientes aeronaves y efectuar el traslado de éstas a Chile. El grupo sería identificado como El destacamento “Bravo-VT-4 “.

Este destacamento viajó el  12 de junio del mismo año, aunque el jefe de la misión lo había hecho días antes con el objeto de iniciar los trabajos de recepción de las aeronaves anticipadamente.  Así el 18 de  ese mes se recepcionan las aeronaves Naval 214, Naval 215, Naval 216 y Naval 217 . Tal como en el “Alfa-VT-4” los aviones fueron provistos de los de los equipos de Navegación / comunicación para darles mayor seguridad durante el cruce atlántico y la travesía de traslado. En esta ocasión los equipos fueron asignados de la siguiente forma : Naval 214 con un equipo Omega y un VHF. Naval 215 con VHF y el Naval 216 con un equipo HF.

El Destacamento “Bravo-VT-4″ inició su viaje a Chile el día 20 de junio siguiendo la misma ruta volada por el ” Alfa”  y arribando a la Base Aeronaval “ El Belloto “el día 5 de julio a las 18:45 hrs  con un tiempo total de vuelo de 65:48 hrs. y con un total de 11.658 millas.  Todo ello efectuado en 15 días.

       

Estando lo 8 Pilatus PC-7 en La Base Aeronaval fueron asignados a la Escuela de Aviación Naval integrando en esa fecha el Escuadrón de Instrucción VT-4, reemplazando definitivamente a los nobles aviones Mentor de los que 4 unidades fueron vendidas a Uruguay.  Sin embargo aun estaba pendiente la recepción de los 2 últimos aviones correspondientes al Naval 218 y Naval 219 , estos aviones fueron embarcados vía marítima y llegaron a Chile al año siguiente para ser ensamblados en el Centro de Reparaciones de la Aviación Naval Finalmente todos los aviones son asignados al Escuadrón VT-1 de Instrucción

EL AVIÓN

Dotado de la confiable turbina Pratt & Whitney PT6-A25A de potencia reducida a 550 shp que le brinda excelentes condiciones de vuelo y fuerza con una razón de ascenso de  2150 ft/min.  el avión presenta una actitud ágil y de buena performance. Gracias a su planta propulsora puede alcanzar un techo máximo de hasta 33.000 ft. Su velocidad máxima es de 222 kt  a 20.000 ft y  un peso máximo de despegue de 2700 kg.  Posee muy buenas cualidades acrobáticas y de maniobra que permite a los pilotos desarrollar habilidades en todas las etapas de la envolvente de vuelo. Por su características y fiabilidad ha sido utilizado por 23 fuerzas aéreas y servicios civiles en el mundo,  incluyendo equipos acrobáticos.

         

Los Pilatus PC-7 en su vida operacional en la Armada han tenido una enorme carga de trabajo sobre sus alas , especialmente por ser el material de instrucción primaria, básica , avanzada , de vuelo por instrumentos y de vuelo táctico. Pero también  lleva en su experiencia un sin número de otras funciones ya que este avión además ha servido como entrenador de defensa antiaérea de los buques de la Escuadra y unidades de superficie  o como simulador de ataque a los mismos.  Por otra parte desde un comienzo la Armada decidió utilizar este avión como el vector de apoyo cercano CAS (Closed Air Support) y como avión de ataque a tierra en apoyo de la Infantería de Marina. Para estos efectos las unidades pueden conformar el Escuadrón de Apoyo en Combate si así fuese necesario.

El PC-7 además es la plataforma de calificación de instructores de las diversas áreas que debe desempeñar un instructor de la Aviación Naval, y es plataforma escuela en todo el personal de la fuerza, lo que incluye a Pilotos, Oficiales Tácticos , Ingenieros, Controladores de Misión, Capitanes de Aeronave, Supervisores mecánicos y mecánicos.

En el aspecto de ataque a tierra cabe destacar que las posibilidades de la aeronave son amplias para su condición, pues posee 6 puntos de sujeción bajo las alas en los que puede portar contenedores dobles de ametralladoras FN calibre 7.62, lanzacohetes de 70 mm y/o bombas de caída libre hasta un total de 1040 kg. de armamento. En estos pilones también se pueden fijar Travel Pod o estanques adicionales de combustible.

El PC-7 es el avión entrenador en vuelo instrumental IFR y navegación efectuando cada año los raid a las zonas norte y sur como parte del entrenamiento de los nuevos pilotos navales.

Aviones PC-7 en instrucción de vuelo en formación sobre el mar

 

Escuadrilla de PC-7 Sobrevolando al Submarino Simpson

El PC-7 ha dado muestras de su excelente calidad como entrenador y de su robusta construcción, en sus 40 años de vida goza de un impresionante record de seguridad.  El avión ha protagonizado muy pocos accidentes, ninguno con consecuencias fatales. El más grave de ellos el 13 de julio de 1999 cuando el Naval 210,  mientras realizaba ejercicios de entrenamiento con unidades de superficie de la Escuadra, sufrió una falla de motor que lo obligó a amarizar frente a las costas de  Pichidangui.  Ambos oficiales navales fueron rescatados por helicópteros embarcados pero la aeronave lamentablemente se hundió sin posibilidad de ser recuperada.

Por su parte en Julio de 2018 el Naval 211 también protagonizó una falla de turbina al despegue en la pista del Aeropuerto Viña del Mar sufriendo un aterrizaje forzoso. El avión fue reparado y devuelto al servicio. En una oportunidad anterior,  un Pc-7 realizó un aterrizaje de emergencia sin consecuencias para el avión ni sus tripulantes, en la pista de emergencia próxima al cabezal 05  del aeródromo Viña del Mar.  Actualmente la Escuela de Aviación Naval posee 7 unidades operativas ya que además del desafortunado 210 que ya no está en servicio, los navales 214 y 218 se encuentran preservados en el Museo de la Aviación Naval ubicado al aire libre en los jardines de la base y como Gate Guardian de la base aeronaval Concón respectivamente, luego de que agotaran sus horas y de sufrir un problemas mayores que la economía del momento no permitió subsanar , dejando esos recursos para sus gemelos aún en vuelo.

Elemento integrado por los PC-7 219 y 212 como parte de un escuadrilla de 4 aviones llegando al aeropuerto Desierto de Atacama para escala técnica.

Otro hecho destacable en estos 40 años es que el día 19 de diciembre de 1987, los Pilatus Naval 211, Naval 216 y Naval 217,  fueron los aviones encargados de realizar el vuelo y posterior aterrizaje inaugural de la nueva pista de la “Base Aeronaval Viña del Mar”, que reemplazó a la base “El belloto”,  como un dato importante es preciso acotar que dicha unidad aérea, parte del sistema aeroportuario nacional,  fue originalmente llamada así cuando pertenecía a la comuna de Viña del Mar,  inaugurada el 16 de marzo de 1989. Al año siguiente, el 6 de septiembre de 1990 se declara como aeródromo de uso público por la DGAC y aunque en 1995 cuando los terrenos en que está ubicado pasaron a pertenecer a la nueva comuna de Concón, aún se le denomina oficialmente como Aeródromo Viña del Mar, con ese nombre aparece en las cartas aeronáuticas nacionales e internacionales, en los procedimientos de salida y llegada SID y STAR y en la publicación oficial AIP-Chile  además de los manuales de aviación Jeppesen distribuidos en el mundo. Incluso el indicativo de llamada es “Viña Torre”.  

Su nombre nunca ha sido “Torquemada” y la confusión se debe a que desde un comienzo algunos periodistas y prensa local lo identificaron así por estar ubicado en terrenos del ex-fundo Torquemada y la meseta del cerro de mismo nombre, pero esa identificación no tiene ningún asidero oficial.  El 16 de marzo de 2015, con el fin de afianzar la identidad y en concordancia con la pertenencia comunal,  la base aérea (no el aeródromo ) pasa a llamarse Base Aeronaval Concón.

Limpiando el avión , Despegue desde su base en Concón

Volviendo al PC-7 otro hecho destacable es que en 1988 se llevó a cabo un programa de certificación y homologación de armamento con Industrias CARDOEN.  En aquella oportunidad algunos PC-7 fueron asignados a esta tarea que consistió en la evaluación de Cluster Bombs (bombas de racimo ) CB-130 fabricadas por aquella empresa nacional. El programa comprendió diversas etapas incluyendo el montaje en el avión, la aerodinámica de armamento suspendido bajo las alas en vuelo ,  pruebas de estabilidad y control con carga completa y lanzamiento.

Naval 218 con bombas CB-130

LOS UNIFORMES DEL PILATUS

Durante su vida operativa 3 han sido las vestimentas principales de este bien diseñado avión y con algunas variantes. Gran parte del tiempo y desde su salida de la fabrica  ha vestido los colores navales con base  gris claro y secciones de color naranja fuerte en la nariz, empenaje y puntas de alas,  con el ancla en la deriva, el escudo nacional en los costados del fuselaje y el numeral al costado de la nariz. Inicialmente los aviones portaban su numero de matrícula también en el cono de cola bajo el estabilizador horizontal. 

Durante los años 80 algunas unidades llevaron un singular esquema de camuflaje en 2 tonos de gris opaco, y sus marcas en negro de baja visibilidad,  dándole al avión un aspecto más agresivo. Posteriormente a principios de los años 90 era posible ver un PC-7 con un camuflaje en tonos de gris opaco y gris opaco oscuro en un tono diferente,  con un único número en el morro que indicaba la ultima cifra de su número de matrícula.   En aquellos años hacia mediados de la década , las unidades navales comenzaron a usar colores de baja visibilidad en tonos oscuros, así aparecen los primeros PC-7 con el nuevo gris marino oscuro brillante, que ofrece un bonito contraste al tradicional color naranja de los aviones navales menores. Todos los aviones en servicio fueron pintados de esa forma.

Aquí se destaca el Naval 211 como la unidad con mayor antigüedad del escuadrón VT-1 y es la encargada de lucir las fauces de tiburón en el morro. Esta expresión de arte en el avión es característico de las unidades aéreas en el mundo que en sus operaciones han cumplido 50.000 horas de vuelo y así lo representa este avión en la Armada.  Por tener este bonito diseño , es el único aparato que no posee el color naranja en su nariz.

Otro detalle a destacar es que con motivo de tensiones con Perú y el proceso de demanda ante la haya, con amenazas de no respetar el fallo y varias declaraciones abiertamente conflictivas de parte de gobiernos del vecino País y contestaciones similares por este lado generando un ambiente tenso que se comenzó a sentir,  a las distintas unidades navales de superficie les fueron borrados sus numerales de registro,  lo que incluyó también a los aviones navales quedando sin identificación alguna en sus fuselajes. Las matrículas comenzaron a volver una vez subsanado el conflicto limítrofe de forma definitiva, pero esta vez solo con un pequeño número en la parte alta del timón de cola; el último digito correspondiente a su matricula naval.

                    

LA NUEVA VIDA

Durante 2018 la empresa Prime Turbines LLC,  subsidiaria de VSE Aviation Inc. (VAI) fue seleccionada para efectuar la revisión mayor y efectuar overhaul a las 2 primeras unidades de turbinas PT6 A-25 utilizadas por los PC-7. Este proceso debiese continuar en la medida que estos motores se vayan cumpliendo de horas.

Por otra parte, se ha entregado recientemente el primer Turbo Trainer Naval equipado con la nueva cabina digital realizado por Avionics Services de Brasil. Esta empresa se encuentra realizado un completo programa de Upgrade de estos aviones,  incorporando instrumentación digital por medio de pantallas de cristal liquido y nuevos equipos de navegación. Los trabajos se realizan en Chile , estando ya el primer avión en pruebas de vuelo y el segundo ya  en proceso de actualización. La flota completa deberá estar lista en el verano de 2021.   Tanto los trabajos en las turbinas como la modernización de cabina, sumado al excelente trabajo de mantención permanente por parte de los especialistas de la Aviación Naval,  darán nueva vida a estos versátiles aviones haciendo que completen gran cantidad de nuevas horas de vuelo y sumarán nuevos  pilotos a las ya 40 generaciones Aviadores Navales formados en sus alas.  

 

 

Fotos: Armada de Chile / Archivo Claudio Cáceres / Archivo Museo Marítimo / Jaime Lamas /Misión A VT-4 / B VT-4

Bibliografía: Revista Enfoque estratégico – Aviación Total Edición conjunta/ Entrevista al Jefe del Comando de Aviación Naval / Historia Naval Carlos Saldivia Pilatus PC-7 / Pilatus Aircraft / Revista de Marina – Unificación de Escuelas de Vuelo , Eduardo Schnaid P./ Archivo Aviación Total / Revista AeroHistoria /Aventura en Monomotor  Vicealmirante Francisco Martinez. / Municipalidad de Concón /Prensa al Día.

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